Muchas de las cosas divertidas de la armonía suceden sobre los acordes dominantes… pero, claro, cuando de pronto estamos en una armonía estática (como la típica jam de 15 minutos en Dm) no hay ningún dominante a la vista. Por suerte, la armonía es flexible y siempre podemos inventar acordes; y funciona mejor de lo que uno creería!

Un firme paso hacia la locura en este nuevo fragmento de la clínica que sucedió en Buenos Aires a mediados del 2014.

Espero les resulte interesante! Un abrazo.